Nueva York -
Tras
reiterar una vez más su apoyo a la actividad minera responsable, el
presidente Ollanta Humala habló abiertamente de los proyectos Conga y
Tía María, que se encuentran en manos de las empresas Yanacocha y
Southern Perú, respectivamente, precisando que está en el terreno de
ambas compañías sacarlos adelante.
En entrevista ofrecida a una agencia de noticias en Nueva York, donde participa en la reunión anual de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Humala declaró que Conga avanza al ritmo que marca la respectiva empresa, mientras que en Tía María se viene realizando el estudio de impacto ambiental (EIA).
"Hemos agilizado todos los permisos que se nos han pedido. Las decisiones para avanzar en el proyecto de Conga no corresponden al Estado, sino a la propia empresa. En cuanto a Tía María, están trabajando en la licencia social, es decir, buscar un entorno positivo para la población", manifestó el Mandatario.
En ese sentido, refirió que cuando llegó al poder, se encontró con un "embalse de proyectos trabados o entrampados" en diferentes instancias de la administración pública, muchos de ellos en temas de arbitraje.
Por ello, destacó que su gobierno creó un comité multisectorial para precisamente desenredar los trámites burocráticos y hacer un seguimiento a los proyectos que no avanzan al ritmo deseado.
El presidente peruano destacó que el sector minero es clave para el país, ya que aporta más del 20% de sus ingresos fiscales.
POLITIZADO. Humala señaló que los organismos reguladores existentes investigan supuestos casos de contaminación cerca de minas, y si los hay, se sanciona a las empresas, pero también destacó que el asunto es más complicado que eso.
"Se ha politizado este tema. Tenemos también movimientos ambientalistas muy radicales financiados por algunos países de Europa que consideran que la minería es mala", precisó.
En ese sentido, indicó que su gobierno no considera mala a la minería. "Creemos que la minería debe ser responsable, respetar la normatividad nacional, y tiene que pagar lo que tiene que pagar en impuestos, canon, regalías, y en su responsabilidad social tiene que participar en los proyectos productivos de toda la zona", agregó.
Los proyectos Conga y Tía María tienen un retraso de más de dos años, pues conflictos desatados por autoridades regionales y locales los mantienen paralizados.
El agua se constituye en un problema medular que genera la resistencia de los pobladores de las comunidades ubicadas en las zonas de influencia de ambos. El primero se encuentra en Cajamarca y el segundo en Arequipa.
ESPALDARAZO. La semana pasada, en la clausura de la convención minera en Arequipa, Humala dio su espaldarazo a la minería formal que se desarrolla en el país.
Su participación por partida doble en el certamen minero (los días jueves y viernes), animó a los empresarios asistentes.
La voz más notoria del empresariado minero lo constituyó el presidente y gerente general de Minas Buenaventura, Roque Benavides, quien señaló que por primera vez los mineros se sienten acompañados por el Gobierno.
Fuente: Diario Correo.
En entrevista ofrecida a una agencia de noticias en Nueva York, donde participa en la reunión anual de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Humala declaró que Conga avanza al ritmo que marca la respectiva empresa, mientras que en Tía María se viene realizando el estudio de impacto ambiental (EIA).
"Hemos agilizado todos los permisos que se nos han pedido. Las decisiones para avanzar en el proyecto de Conga no corresponden al Estado, sino a la propia empresa. En cuanto a Tía María, están trabajando en la licencia social, es decir, buscar un entorno positivo para la población", manifestó el Mandatario.
En ese sentido, refirió que cuando llegó al poder, se encontró con un "embalse de proyectos trabados o entrampados" en diferentes instancias de la administración pública, muchos de ellos en temas de arbitraje.
Por ello, destacó que su gobierno creó un comité multisectorial para precisamente desenredar los trámites burocráticos y hacer un seguimiento a los proyectos que no avanzan al ritmo deseado.
El presidente peruano destacó que el sector minero es clave para el país, ya que aporta más del 20% de sus ingresos fiscales.
POLITIZADO. Humala señaló que los organismos reguladores existentes investigan supuestos casos de contaminación cerca de minas, y si los hay, se sanciona a las empresas, pero también destacó que el asunto es más complicado que eso.
"Se ha politizado este tema. Tenemos también movimientos ambientalistas muy radicales financiados por algunos países de Europa que consideran que la minería es mala", precisó.
En ese sentido, indicó que su gobierno no considera mala a la minería. "Creemos que la minería debe ser responsable, respetar la normatividad nacional, y tiene que pagar lo que tiene que pagar en impuestos, canon, regalías, y en su responsabilidad social tiene que participar en los proyectos productivos de toda la zona", agregó.
Los proyectos Conga y Tía María tienen un retraso de más de dos años, pues conflictos desatados por autoridades regionales y locales los mantienen paralizados.
El agua se constituye en un problema medular que genera la resistencia de los pobladores de las comunidades ubicadas en las zonas de influencia de ambos. El primero se encuentra en Cajamarca y el segundo en Arequipa.
ESPALDARAZO. La semana pasada, en la clausura de la convención minera en Arequipa, Humala dio su espaldarazo a la minería formal que se desarrolla en el país.
Su participación por partida doble en el certamen minero (los días jueves y viernes), animó a los empresarios asistentes.
La voz más notoria del empresariado minero lo constituyó el presidente y gerente general de Minas Buenaventura, Roque Benavides, quien señaló que por primera vez los mineros se sienten acompañados por el Gobierno.
Fuente: Diario Correo.
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